El presidente de la Corporación provincial, Francisco Salado, se encontraba de visita oficial en Ronda este pasado sábado. Concretamente ese día en el Acuartelamiento ‘Montejaque’ en Ronda, se celebraba al acto de jura de bandera civil organizado por la Legión. En la agenda oficial de Salado se recogía su asistencia al evento a las 11,30 horas del sábado 5 de abril en el patio de Armas del acuartelamiento.
Nada que objetar porque el presidente de la institución provincial asista en representación de la Diputación a este tipo de actos. Sin embargo, lo que parece que no ha sentado bien, sino que incluso ha molestado, es que pudiendo haber acudido, aunque fuera un rato de manera testimonial a la manifestación que se celebró esa mañana en Ronda, no lo hubiera hecho. Si Salado hubiera tenido ese gesto de apoyo a las 4.500 personas que aproximadamente participaron, habría sido visto con simpatía. Además, en la manifestación estaba presentes alcaldes y concejales de distintos municipios de la Serranía y no conviene olvidad que la Corporación provincial, la Diputación de Málaga, representa a todos los Ayuntamientos de pueblos y ciudades de la provincia, incluida la comarca de Ronda y el presidente, es decir Francisco Salado, ostenta el cargo y tiene la vara de mando provincial, precisamente por una elección indirecta de los concejales de Málaga.

Este último motivo, sí que es un motivo importante para haber acudido. A ello habría que unir la circunstancia de que fue una manifestación unitaria, organizada por asociaciones civiles independientes y no dictada ni dirigida por ninguna formación política. En teoría, todos los partidos de Ronda estaban de acuerdo en la convocatoria. Pero, parece que a los miembros del Partido Popular, les cuesta más expresar el apoyo y hacerse visible junto al pueblo, en una reivindicación tan de justicia como es la mejora inmediata de las comunicaciones y poner fin al aislamiento de una comarca cuyos ciudadanos también pagan impuestos para la Diputación… y de paso el de Francisco Salado.