15 personas a las que se las explotaba laboralmente, sin contrato y sin salarios por su trabajo, han sido liberadas por la Guardia Civil en las provincias de Jaén y Málaga. Una situación execrable la que sufrían estas personas que, además de trabajar sin recibir contraprestación alguna por ello, no tenían tampoco ningún tipo de descanso, incluso algunos de estos trabajadores explotados vivían en los mismos establecimientos de hostelería. La organización se quedaba con la documentación personal de estas personas para, de esa manera, imposiblitar su libre movimiento.
Las víctimas se hallaban retenidas en varias localidades de la provincia de Jaén y en la provincia de Málaga. Las personas explotadas en Jaén, fueron liberadas en Jódar (7), Cazorla (2) y en Villacarrillo (2). Las de la provincia malagueña eran tres y estaban en Ronda.
Han sido detenidas por este caso un total de ocho personas así como se está investigando a tres más. Se les acusa de posible pertenencia a una organización criminal. La operación “Salaria”, que es como se denomina la actuación de la Guardia Civil también se extiende a otra comunidad autónoma, como es la región de Murcia.
La organización se dedicaba a facilitar la inmigración ilegal vulnerando los derechos laborales de los ciudadanos extranjeros, así como falsificación documental, coacciones, suplantación de identidad y fraude a la Seguridad Social. Se financiaba con el dinero que la víctimas eran obligadas a entregarle para «pagar» así su regularización. Las víctimas carecían de cobertura legal y no recibían ningún tipo de remuneración económica.
El operativo de la Benemérita comenzó tras detectar la apertura de más de una veintena de establecimientos de comida rápida en Jaén, todo ello en un plazo muy corto de tiempo. Estos locales despertaron la atención de las autoridades debido a su escasa o nula actividad comercial. Además, se constató que la mayoría de los empleados eran ciudadanos pakistaníes que se encontraban en situación irregular en España.
