Ronda vuelve a ser escenario de otro caso que afecta a la seguridad. Esta vez, la Policía Local ha logrado identificar a cuatro mujeres y un hombre que operaban sustrayendo carteras y objetos personales a vecinos y turistas.
La actuación policial se produjo en dos turnos, mañana y tarde, y permitió detectar a este grupo que utilizaba estrategias tan simples como cambiar de ropa, llevar gafas de sol o gorras para evitar ser reconocidos como se observa en la fotografía de la Policía Local de Ronda. Uno de los miembros, además, tenía pendiente una orden de detención emitida por un juzgado de Madrid.
Aunque la intervención policial ha sido eficaz, lo cierto es que el problema de la presencia de carteristas en zonas concurridas como el centro histórico o los puntos turísticos de la ciudad debe de ser abordado con mayor contundencia, por lo que conlleva de inseguridad y malestar entre comerciantes, visitantes y vecino y vecinas en general.
Cabría preguntarse si la Policía Local, pese a su esfuerzo, trabaja con medios limitados frente a un fenómeno que necesita una respuesta más firme.